Grecia, cuna de la democracia, tras haberse convertido en laboratorio de los experimentos mas radicales de la corriente occidental del capitalismo como sistema económico orientado a la satisfacción de "mayorías" y que no dejó más que un país en una grave crisis, una minoría mucho mas rica, y una gran mayoría que en este caso serían los helenos mucho mas pobres.
Todo comenzó a finales de los 90, donde para que se le permitiera a Grecia el ingreso a la zona económica euro, pese a no disponer de avales económicos que cumplieran con los requisitos básicos, sin embargo así se hizo, Grecia ingresó a la zona económica europea y así el experimento inició.
Al principio se solicitaron préstamos para la construcción de puertos, aeropuertos y una infraestructura costosisima para los juegos olímpicos Atenas 2004 (11 mil millones de euros, mas sus secuelas, intereses y moratorias), compras de armas (a USA, Alemania, Francia e Italia) por encima de la inversión social en Educación, Salud y Alimentación, mas de 12 mil millones de euros en gastos militares que incluyen 1600 tanques 75 aviones F-16 y Submarinos, Mientras Papandreau y Samaras continuaban solicitando rescates, tras rescates (mientras mas se solicitaban rescates, más fuertes eran las condiciones impuestas, seguía la compra de armas a los fuertes de la OTAN (USA, Francia, Alemania, la priorización de empresas alemanas, holandesas, francesas e italianas en contratos de obras públicas como el sonado caso de SIEMENS y el metro de Atenas, o el Postbank, la compra de bienes y servicios en estos países dejando de lado la producción griega, privatizaciones progresivas, como de Electricidad, Salud y Energía y pare usted de contar) en Grecia hasta que la situación se hizo insostenible a finales de 2014, lo que provocó un cambio de régimen político y la llegada al poder de Tsipras y SZYRYZA, a una Grecia con más de 225 mil millones de euros de deuda, con una desocupación de más del 30% y 60% en los jóvenes, miles de empresas y fábricas cerradas con un completo descuido en áreas como salud y educación.
Tras el vendaval que significo el referendo griego y la victoria del OXI (NO) a la rendición de condiciones, Tsipras el primer ministro Heleno pareciera rendirse a designios de la TROIKA, Acuerdan un tercer rescate por 80 mil millones de euros, con condiciones como la Privatización de Activos Públicos Griegos, Venta de Islas, La Puesta En Garantía de Tesoros Patrimoniales Griegos, Recortes de Pensiones, Alargamiento de la Edad para jubilarse y una seria de medidas que van en detrimento de la población mas afectada, los pobres.
Sin embargo esto no puede catalogarse como el fin de la situación, ya que como dice el titulo de esta publicación, el espartano hoy representado por el pueblo griego se encuentra en un laberinto, y vaya laberinto. Nadie puede realizar un pronostico seguro sobre lo que pasará con la cuna de la democracia y la filosofía, no se sabe a ciencia cierta que vaya a pasar con el dinero del tercer rescate, si se invertirá en la población para el desarrollo del país o seguirá sirviendo para pagos de intereses y bienes innecesarios que solo benefician al FMI, el BCE y los burócratas en Bruselas. No Sabemos si habrá Grexit (Salida de Grecia de la Zona Económica Euro) puesto que pese al acuerdo, su pudiera suspender temporalmente a Grecia de la Zona Economica Euro, o pudiera seguir como está, no sabemos si Grecia volverá a caer en Default Nuevamente (lo que para mi es inevitable), no sabemos que hechos políticos se susciten de ahora en adelante en las calles de Atenas y fuercen un cambio de régimen, político o económico. Mientras desde aquí solo nos queda desearle lo mejor al pueblo Griego que atraviesa una grave crisis, de la cual ellos no son culpables, los culpables son unos pocos políticos que tras comisiones le vendieron el país a unos prestamistas totalmente irresponsables para comprar cosas que no necesitaban y donde el vendedor (la TROIKA) resulto cobrando y también quedándose el cambio (vuelto).
Aquí les dejo la apreciación del periodista especialista en temas financieros y cineasta Max Keiser:
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